El ministro israelí de Finanzas, Bezalel Smotrich, y el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, han exigido al primer ministro, Benjamin Netanyahu, que entregue inmediatamente la autoridad sobre la Cisjordania ocupada a quien se la prometió, informaron el viernes los medios de comunicación israelíes.
Según los medios israelíes, esta cuestión ha provocado tensiones en el seno de la coalición, agravadas por la demolición el miércoles de un olivar al norte de la ciudad cisjordana ocupada de Ramala.
Smotrich, jefe del Partido Sionista Religioso, y Ben-Gvir, jefe de Otzma Yehudit, pidieron a Netanyahu que respetara los acuerdos de la coalición, informó The Jerusalem Post.
Haaretz informó de que la evacuación del olivar: "Escaló en cuestión de minutos hasta convertirse en una batalla interna del gobierno sobre política y autoridad".
El famoso periódico israelí afirmó que esto "refleja el tambaleante estado de la nueva coalición", citando también la cuestión de la revisión judicial.
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Smotrich tuiteó: "El arranque de la arboleda en el valle de Shiloh [al norte de Ramala] es una injusticia que clama al cielo y que podría y debería haberse evitado... Exigimos y recibimos en los acuerdos de coalición la responsabilidad sobre la Administración Civil y la vida civil en Judea y Samaria (Cisjordania) precisamente para acabar con este maltrato discriminatorio a los colonos."
Mientras tanto, The Times of Israel informaba "El traspaso de poderes del delicado organismo del Ministerio de Defensa responsable de autorizar la construcción de asentamientos y la demolición de edificios ilegales israelíes y palestinos en la zona C de Cisjordania, controlada por las FDI, aún no se ha producido, en medio de una importante resistencia tanto del estamento de seguridad como de la administración Biden."
También informaba de que los críticos argumentaban que: "Entregar el control de una autoridad de Cisjordania a una oficina civil dirigida por el ministro de Finanzas equivaldría a una anexión de facto".
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Smotrich, según The Jerusalem Post, subrayó: "Si (Yoav) Gallant tiene algún problema con eso [cederle el poder], es bienvenido a dimitir. Estoy convencido de que muchos en el Likud estarían encantados de ocupar su lugar en el Ministerio de Defensa".
Sobre esta cuestión, el líder de la oposición Yair Lapid tuiteó: "¿Os habéis dado cuenta de que hay dos ministros en el Ministerio de Defensa, uno a favor y otro en contra? Esto no es un gobierno; es un preescolar sin maestro de preescolar".
El ex funcionario del Likud Gideon Sa'ar también tuiteó: "El primer ministro se puso en contacto conmigo y me pidió ayuda. Le dije: 'Bibi, me encantaría ayudarte. Pero no sé si ayudar a tu mano derecha o a tu izquierda'".
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