Una fuente del gobierno libanés ha afirmado este jueves que las autoridades libanesas creen que el primer ministro saliente, Saad Hariri, está retenido contra su voluntad en Arabia Saudí.
La fuente explicó a la agencia Reuters que Líbano va a pedir a los países árabes y extranjeros que presionen al gobierno saudí para que se ponga fin a la retención de Hariri, agregando: "consideramos que aún no hemos recibido la dimisión, y que Saad Hariri sigue siendo nuestro primer ministro".
Estos hechos se producen a pesar de que Adil Al Jubeir, primer ministro de Asuntos Exteriores saudí, negara que el reino haya obligado al primer ministro libanés Saad Hariri a dimitir. También afirmó que Hariri puede abandonar el reino en cualquier momento, asegurando que no está retenido allí.
Hariri, de 47 años, anunció desde Riad su renuncia como primer ministro libanés el sábado pasado. También expresó que Hezbolá había logrado tomar el control del ejército libanés por la fuerza y que temía por su vida.
Diversos políticos y activistas plantearon preguntas sobre la posibilidad de que Riad hubiera detenido a Hariri, presente actualmente allí, en el marco de la llamada "campaña anticorrupción". Basaban esta posibilidad en el hecho de que Hariri posee la nacionalidad saudí y crecen a su alrededor sospechas relacionadas con la empresa “Saudi Ogih”, en la que posee acciones.
El sábado 4 de noviembre de 2017, las autoridades saudíes detuvieron a decenas de personalidades, incluidos 11 príncipes de la familia real, 38 ministros, y numerosos y prominentes hombres de negocios, acusándoles, según fuentes oficiales del Reino, de participar en actos de corrupción.
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