Un refugiado palestino, Muhammad Khalil Al-Ali, de 23 años, de la aldea de Keikat, en Akka, que creció en el campo de refugiados libanés de Burj Al-Barajneh, ha desarrollado con éxito una cámara que graba vídeos bajo el agua y puede utilizarse en investigaciones científicas, películas y mucho más.
Ali, que estudia ingeniería mecatrónica en la Universidad de Oriente Medio, en el norte de Chipre, dijo que, de no ser por los limitados recursos económicos, el dispositivo habría estado equipado también con sensores para medir la presión y la temperatura bajo el agua.
En una entrevista con el sitio de noticias Al-Awda, añadió que el dispositivo, que desarrolló para su proyecto de graduación, tiene varias funciones, incluida la posibilidad de moverlo mediante un mando a distancia.
"Busqué un patrocinador pero, por desgracia, no lo encontré, así que decidí embarcarme en esta aventura con mis modestas capacidades. Este aparato era como un sueño, y ahora, gracias a Dios, se ha convertido en un aparato distinguido que puede desarrollarse para convertirse en un aparato global equipado con detalles y piezas que pueden utilizarse en documentales de Mega, o en investigaciones científicas submarinas", dijo Ali.
"Luchamos contra las circunstancias que nos combaten y hacemos del dolor esperanza para alcanzar nuestras metas. Hoy soñamos con nuestras metas y mañana las alcanzamos. Es la determinación y la persistencia lo que hace a los hombres. Palestina necesita todos nuestros esfuerzos, y cada proyecto o logro que conseguimos nos acerca más al regreso a la hermosa Palestina", añadió.
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