Rusia ha estado trabajando para satisfacer las demandas de Turquía en el norte de Siria como una alternativa a la operación militar terrestre turca, dijeron funcionarios turcos.
Según los funcionarios, Ankara exigió que las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) se retiraran de las zonas de Manbij, Ayn Al-Arab y Tal Rifaat, y las sustituyeran por las instituciones del régimen sirio, incluidas las fuerzas de seguridad y los guardias fronterizos.
Ankara ha dado un plazo para cumplir sus condiciones, de lo contrario, la alternativa sería una operación militar que incluiría esas zonas, dijeron los funcionarios turcos.
Por su parte, el portavoz presidencial turco, Ibrahim Kalin, dijo el martes que la operación militar terrestre en el norte de Siria puede comenzar en cualquier momento, dependiendo de la evaluación de las referencias interesadas en Turquía.
Kalin dijo que Ankara exige que las Unidades de Protección Popular kurdas se retiren hasta 30 km de la frontera turca, y que dejen de intentar infiltrarse en los territorios turcos.
Kalin dijo que las fuerzas turcas aún no han atacado a ningún soldado estadounidense o ruso, subrayando que su único objetivo son las Unidades de Protección Popular kurdas en el norte de Siria.
"Las operaciones militares turcas han bloqueado el establecimiento de un corredor terrorista desde la frontera iraquí hasta el Mediterráneo", añadió.
Mientras tanto, los medios de comunicación kurdos citaron a un portavoz de las SDF diciendo que los militantes han rechazado las demandas y condiciones de Turquía durante sus reuniones con los funcionarios rusos, porque no se ajustan a los requisitos del pueblo kurdo, informó la agencia rusa RIA Novosti.
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La agencia citó al portavoz diciendo que las FDS han pedido ayuda a los representantes rusos para concluir un acuerdo con el régimen sirio para proteger las tierras que controlan en el noreste del país.
El portavoz dijo que las fuerzas de las FDS tienen continuas e importantes reuniones con la parte rusa, subrayando que la parte kurda sólo ha recibido esfuerzos de los rusos para reducir la escalada, mantener la estabilidad y evitar cualquier ataque turco.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha llamado recientemente a poner fin al "juego" de ocultar las extensiones del PKK bajo la bandera de la guerra contra Daesh.
Erdogan dijo, en una conferencia de prensa celebrada en Ankara, que su país no pide permiso a nadie cuando toma medidas relacionadas con la seguridad de la patria y del pueblo.
Por su parte, el coordinador de comunicaciones del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kirby, dijo que Turquía tiene derecho a alejar el terrorismo de sí misma. Sin embargo, indicó la oposición de Washington a cualquier medida que pueda afectar a la continuación de la guerra contra Daesh o causar víctimas entre los civiles.
Sobre el terreno, las fuerzas turcas renovaron los bombardeos contra los emplazamientos de las Fuerzas de Autodefensa en el noreste de Siria, mientras que el Ministerio de Defensa turco anunció la "neutralización" de 14 militantes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán y de las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo.
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