Con la ayuda de EE.UU., Israel está planeando socavar un nuevo movimiento palestino en la ONU que pide una opinión urgente de la Corte Internacional de Justicia (CPI) sobre la legalidad de la ocupación israelí.
Ynet News informó ayer de que se espera que el Comité Especial de Política y Descolonización discuta el asunto el miércoles.
"Si se alcanza un consenso", dijo el periódico israelí, "los palestinos lo presentarán para una segunda ronda de votación en la Asamblea General de la ONU en diciembre".
Esto se produce días después de que se publicara un informe de la Comisión de Investigación de la ONU sobre las violaciones de los derechos humanos en Cisjordania y Gaza relacionado con la ofensiva israelí sobre Gaza en mayo de 2021, en la que Israel mató a más de 254 palestinos.
El informe, según Ynet News, concluye que Israel cometió "crímenes de guerra" y "crímenes contra la humanidad" contra los palestinos en ese ataque.
Mientras tanto, la medida se produce un año después del discurso del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, ante la Asamblea General de la ONU, en el que dijo que si Israel no abandonaba Cisjordania, llevaría el asunto a La Haya para obligar a la CPI a emitir un dictamen jurídico sobre la legalidad de la ocupación.
Como contramedida, el embajador israelí ante la ONU, Gilad Erdan, exigirá una votación sobre la cuestión este viernes en un intento de anular el esfuerzo palestino.
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