El Movimiento de Resistencia Libanesa, Hezbolá, afirma que no reconocerá ningún acuerdo sobre la frontera marítima entre el gobierno e Israel hasta que se firme oficialmente.
Ayer, el secretario general, Sayyed Hassan Nasrallah, dijo que hasta que se cierre un acuerdo, Hezbolá "permanecerá vigilante".
"Las horas pendientes son fatídicas. Como pueblo del Líbano, estamos esperando (la declaración de) una posición oficial por parte de nuestro Presidente y del enemigo sionista", dijo.
Los comentarios de Nasrallah se produjeron tras el anuncio de un histórico acuerdo marítimo entre Beirut e Israel con la mediación de Estados Unidos, destinado a poner fin a una larga disputa sobre el acceso a los yacimientos de petróleo y gas que se extienden a ambos lados de la frontera. Según se informa, el Gabinete de Seguridad y el Gobierno de Israel se reunirán hoy para ratificar el acuerdo con Líbano.
Aunque no se han hecho públicos los detalles del acuerdo, se ha informado de que el yacimiento de gas de Karish quedaría bajo control israelí, además de una pequeña parte del posible yacimiento de gas de Qana. El resto de Qana quedaría bajo el control de Líbano, que pagaría regalías a Israel por el gas que se extraiga de la parte israelí.
"Se trata de un logro histórico que reforzará la seguridad de Israel, inyectará miles de millones en su economía y garantizará la estabilidad de nuestra frontera norte", declaró el primer ministro israelí, Yair Lapid, en un comunicado.
El presidente libanés, Michel Aoun, saludó el acuerdo de demarcación como "un regalo para el pueblo libanés", y añadió que "sacará al Líbano del abismo".
"La situación en Líbano se deterioró mucho después de que el país cayera en un abismo que no fue una coincidencia, sino el resultado de acciones y comportamientos que lo llevaron a la situación actual", dijo Aoun. El presidente estadounidense, Joe Biden, calificó ayer el acuerdo de "avance histórico".
Hezbolá había advertido previamente a Israel sobre el uso de la "fuerza" si se impedía a Líbano extraer sus propios recursos naturales. Ayer, un alto legislador de Hezbolá dijo que la postura firme de Líbano y los esfuerzos del Movimiento de Resistencia habían ayudado al país a salvaguardar sus derechos marítimos. "Si no hubiera sido por esta fuerza [de la resistencia] que atemoriza al enemigo, no habríamos podido recuperar y mantener nuestros derechos", dijo el diputado Hussein Al-Jishi.
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