El jefe del Mando Central de Estados Unidos se reunió con altos dirigentes talibanes en Doha, la capital de Qatar, y llegó a un acuerdo para que el esfuerzo de evacuación de Afganistán pueda continuar sin interferencias, según un informe publicado el lunes, informa la Agencia Anadolu.
La reunión del general Frank McKenzie fue reportada por Associated Press, que citó a un funcionario de defensa anónimo que habló con la agencia de noticias bajo condición de anonimato.
La situación en el aeropuerto internacional Hamid Karzai de Kabul se ha vuelto cada vez más caótica debido al cierre de las embajadas en el país, lo que ha hecho que los miembros del personal acudan al aeropuerto, junto con decenas de miles de afganos desesperados por salir.
Funcionarios estadounidenses dijeron que siete personas han muerto, entre ellas algunas que se aferraron a un avión militar estadounidense y cayeron al suelo cuando el avión despegó, informó AP.
Un vídeo de testigos del lugar de los hechos muestra a cientos de personas corriendo por la pista, y a gente sentada encima de un avión de pasajeros, aunque los viajes aéreos civiles están suspendidos, y el transporte aéreo se ha reducido a las operaciones militares.
Los talibanes resisten, con EE.UU. en el control del aeropuerto
La escena se ha vuelto más desesperada desde que los talibanes entraron en Kabul el domingo, sin obstáculos, y anunciaron que ahora controlan el país, marcando el regreso al poder 20 años después de que las fuerzas estadounidenses invadieran el país tras los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001.
Por el momento, parece que los talibanes se están absteniendo de intentar tomar el aeropuerto, la última parte del país que no está bajo el dominio de los talibanes.
De hecho, un reportero de la CNN que se encontraba en el lugar de los hechos dijo el lunes por la noche en Kabul que los combatientes talibanes estaban controlando a la multitud fuera del aeropuerto, para permitir una entrada más ordenada de personas al interior.
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El Secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, había advertido que cualquier intento de los talibanes de interrumpir la evacuación conllevaría una rápida represalia. Se calcula que hay unos 6.000 soldados estadounidenses en el lugar para asegurar el aeropuerto y ayudar en la evacuación.
El Departamento de Estado anunció que el ejército estadounidense controla ahora las operaciones en el aeropuerto, y los funcionarios que supervisan la logística dicen que es posible sacar del aeropuerto a unas 5.000 personas al día de forma segura, según múltiples informes.
Se está dando prioridad al personal de las embajadas, incluidos unos 4.000 en la de Washington, junto con decenas de miles de ciudadanos afganos que ayudaron a EE.UU. y sus aliados durante los 20 años de guerra.
Pero los ciudadanos de a pie se apresuran ahora a acudir al aeropuerto y los analistas militares que hablaron con los medios de comunicación estadounidenses afirman que, en algún momento, el último vuelo militar saliente despegará, dejando a los que queden en tierra ante un futuro muy incierto en el país.
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