El parlamento libio pidió al gobierno que estuviera totalmente preparado contra la "agresión" de Egipto, denunciando los recientes comentarios del presidente egipcio Abdel-Fattah Al-Sisi de que su ejército podría intervenir en el país devastado por la guerra, informa la Agencia Anadolu.
En una declaración reciente, los legisladores libios pidieron a las autoridades que tomaran en serio las recientes amenazas de Al-Sisi y que revisaran todas las posibles medidas para responder en "el momento y el lugar adecuados".
La declaración del sábado decía que los comentarios de al-Sisi, que aludían a la posibilidad de enviar una misión militar externa a Libia, equivalían a "una amenaza directa de uso de la fuerza contra nuestro estado".
"Libia no planteó una amenaza a la seguridad de Egipto, sino que el régimen egipcio contribuyó a la agresión contra la soberanía de Libia e interfirió en la seguridad e integridad de sus territorios", dijo.
También condenó a al-Sisi por decir que el ejército libio era una "milicia terrorista", subrayando que el ejército del país luchaba contra el terrorismo bajo el gobierno libio internacionalmente reconocido.
La amenaza de Al-Sisi es una violación del derecho internacional, así como de la soberanía de Libia, añadió.
En un discurso televisivo en la ciudad egipcia de Matrouh, cerca de la frontera libia, el sábado, Al-Sisi sugirió que El Cairo podría lanzar "misiones militares externas" en Libia "si fuera necesario", diciendo que "cualquier intervención directa en Libia ya se ha convertido en legítima internacionalmente".
Al-Sisi le dijo a su ejército que "esté preparado para llevar a cabo cualquier misión aquí dentro de nuestras fronteras, o si es necesario fuera de nuestras fronteras".
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La ONU reconoce al gobierno libio encabezado por Fayez al-Sarraj como la autoridad legítima del país mientras Trípoli lucha contra las milicias del general renegado Khalifa Haftar.
El gobierno lanzó la Operación Tormenta de Paz contra Haftar en marzo para contrarrestar los ataques a la capital, Trípoli, y recientemente recuperó lugares estratégicos, incluyendo Tarhuna, el último bastión de Haftar en el oeste de Libia.
Ha condenado severamente el respaldo militar de Egipto, los Emiratos Árabes Unidos, Francia y Rusia a los ataques de Haftar en Trípoli, que comenzaron el 4 de abril de 2019.
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