El Líbano negó ayer los informes recientes sobre una reunión celebrada entre los funcionarios libaneses e israelíes en Chipre.
"Las declaraciones recientes se producen en un contexto de confundir a la comunidad internacional sobre la posición inmutable del Líbano respecto a la demarcación de las fronteras terrestres y marítimas con la ocupada Palestina", dijeron al canal Al-Mayadeen fuentes locales cercanas a la presidencia libanesa.
"No se celebraron reuniones entre los funcionarios libaneses e israelíes en Chipre o en otros lugares", destacaron las fuentes.
El lunes, Independent Arabia, con sede en Londres, informó que "recientemente se han celebrado reuniones entre funcionarios libaneses e israelíes en Grecia y Chipre para discutir la demarcación de la frontera marítima".
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La página web árabe también citó a fuentes oficiales que dijeron que "altos funcionarios libaneses informaron a Israel, a través de un tercero, que su país no sería una base para una respuesta iraní por parte de Hezbolá o de cualquier otra parte si se desatara una guerra entre Irán y Estados Unidos (EE.UU.) ".
Agregó que el presidente libanés, Michel Aoun, había informado a los funcionarios israelíes, a través de un enviado especial, que según "entendía por su aliado, Hezbolá, no tenían intención de atacar a Israel".
Hezbolá, señaló Aoun, "respondería a un ataque estadounidense contra Irán, posiblemente dentro del Golfo".
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