El ex muftí Mahfouz Ould Al-Walid de Al-Qaeda, conocido como Abu Hafs Al-Mauritani, ha criticado la guerra de Arabia Saudí en Yemen y su dependencia de los Estados Unidos contra Irán.
Ould Al-Walid explicó en su página de Facebook que es poco probable que se planee una guerra entre Estados Unidos e Irán. Pero es posible un enfrentamiento "por error o error de cálculo".
Agregó: “Algunos de los necios que son gobernantes del Golfo están esperando una guerra entre Irán y los Estados Unidos, aunque es poco probable que ocurra esta guerra. Sin embargo, si estallase, las monarquías del Golfo Pérsico serán las primeras víctimas".
“En caso de un enfrentamiento, los países del Golfo pagarán el coste de la guerra. Y en caso de no ocurrir, pagarán el precio de la paz”, continuó Ould Al-Walid.
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El ex muftí de Al Qaeda identificó una diferencia estratégica entre Arabia Saudí e Irán.
“Irán está luchando con los grupos chiítas en la región (los hutíes en Yemen, Hezbolá en el Líbano, las milicias chiítas en Iraq y Siria) y se ha fortalecido. En cambio, Arabia Saudí está luchando contra grupos sunitas en la región y ha agotado sus energías con ellos".
La semana pasada, cuatro barcos, incluidos tres petroleros, fueron saboteados en los Emiratos Árabes Unidos. El grupo hutí, respaldado por Irán, lanzó un ataque con drones contra dos grandes estaciones de bombeo al oeste de Riad, que detuvieron el bombeo de petróleo.
Estas instalaciones fueron construidas para sustituir al Estrecho de Ormuz, una importante vía fluvial para el comercio y el petróleo, pero es vulnerable a los ataques de Irán.
Teherán ha amenazado repetidamente con cerrar el Estrecho de Ormuz en caso de una guerra con los Estados Unidos o si las exportaciones de petróleo de Irán se viesen amenazadas.
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En este contexto, la Quinta Flota de los Estados Unidos (con sede en Bahréin) anunció el sábado pasado que el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) ha lanzado mejores patrullas de seguridad en el mar internacional, en estrecha cooperación con la Armada de los Estados Unidos.
Además, el Pentágono también ha anunciado el envío de portaaviones Abraham Lincoln y de bombarderos a Oriente Medio, alegando que hay información de inteligencia sobre posibles preparativos de Teherán para llevar a cabo ataques contra fuerzas o intereses de los Estados Unidos.
La inteligencia estadounidense ha vigilado la colocación de misiles de Irán en pequeñas embarcaciones en el Golfo, lo que ha incrementado los temores de su ataque a las fuerzas y activos estadounidenses o a las fuerzas de sus aliados, según el periódico New York Times.
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