Unos 13.000 palestinos en la Franja de Gaza ocupada permanecen sin hogar, cuatro años y medio después del asalto destructivo de Israel contra el enclave bloqueado.
Durante los 50 días de la operación “Borde Protector" en 2014, los ataques israelíes causaron daños significativos a la infraestructura civil, con alrededor de 18.000 unidades residenciales completamente destruidas o muy dañadas. Más de 100.000 palestinos quedaron sin hogar, o 17.000 familias.
Según una actualización de la ONG de derechos humanos B’Tselem, alrededor del 20% de los hogares todavía permanecen inservibles, y aproximadamente 2.300 familias, aproximadamente 13.000 personas, siguen sin hogar.
Leer: Palestinians have won a moral victory, but what will happen next?
Alrededor de 1.600 de estas familias habían estado recibiendo subvenciones de alquiler de UNRWA, pero tras los recortes de los fondos estadounidenses el año pasado, UNRWA se vio obligada a suspender la asistencia financiera.
"La destrucción fue causada por la política ilegal de fuego abierto de Israel, que incluía el bombardeo de civiles y estructuras civiles desde aire, tierra y mar", declaró B’Tselem. Según las propias cifras del ejército, "la escala de bombardeos durante la operación fue inaudita: 35.000 proyectiles de artillería de diferentes tipos y 14.500 proyectiles de tanques, sin incluir los ataques aéreos".
B’Tselem agregó que "Israel ha renunciado a toda responsabilidad por los resultados de sus acciones militares durante la operación “Borde Protector" y ha evitado pagar cualquier precio por ellos".
A menos que se indique lo contrario en el artículo, este trabajo de Middle East Monitor/Monitor de Oriente está bajo licencia Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional. Si la(s) imagen(es) lleva(n) nuestro crédito, esta licencia también se aplica a ellos. ¿Qué significa esto? Para otros permisos por favor contáctenos. 
