Un informe elaborado por el Centro Bagdadí para los Derechos Humanos ha revelado la dolorosa situación de las prisiones iraquíes, donde 39.000 hombres y mujeres sobreviven en pésimas condiciones sometidos a torturas, malos tratos y discriminación sectaria.
El informe, a una copia del cual ha tenido acceso Khalij Online el pasado miércoles, señala también que las violaciones de los derechos humanos de los presos en estas prisiones del Ministerio de Justicia iraquí han aumentado en gravedad durante el año 2017.
El informe desvela también que estas violaciones de los derechos humanos de estas personas no se limitan sólo a la población reclusa, sino que su gravedad ha aumentado en tanto también están expuestos a la represión y a los malos tratos sus familiares durante las visitas periódicas que realizan para verlas. También denuncia que son explotados económicamente debido al aumento de los precios de las materias que el Ministerio vende a los y las presas a través de instalaciones oficiales en el interior de las prisiones, ya que el Ministerio continúa prohibiendo a las familias introducir alimentos, vestidos y otros bienes de consumo básicos en el interior de las mismas.
El informe, basado en testimonios personales de los presos y las presas, de sus familiares, de abogados iraquíes, de activistas de derechos humanos y de funcionarios de la sección de la administración iraquí encargada de reformar las instituciones defectuosas, señala también que las prisiones en las que se registran peores tratos son la prisión central de Naasariyya, situada en el desierto de Naasariyya, en la provincia de Dzi Qaar, al sur de Iraq, y la prisión central de Al Huut (Al Taajii), situada al norte de la capital, Bagdad.
El informe también publica datos y estadísticas sobre los 38.000 presos y las más de 900 presas. Es de mencionar que el Ministerio de Justicia iraquí oculta a la opinión pública y a las organizaciones de derechos humanos internacionales y locales en sus informes oficiales la dureza de las condiciones que se viven en las prisiones, donde además se extienden peligrosas enfermedades.
Leer: La UE pide un Irak más inclusivo y democrático
A menos que se indique lo contrario en el artículo, este trabajo de Middle East Monitor/Monitor de Oriente está bajo licencia Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional. Si la(s) imagen(es) lleva(n) nuestro crédito, esta licencia también se aplica a ellos. ¿Qué significa esto? Para otros permisos por favor contáctenos. 
