Cientos de ciudadanos árabes israelíes han organizado una protesta provocando un atasco de vehículos frente al parlamento israelí en Jerusalén, después de la demolición por parte del Estado de casas de propietarios árabes y el asesinato de Yacob Abul Qi'an de Um Al-Hiran.
El convoy de protesta comenzó en dos lugares, la ciudad de Qulansawe en el Triángulo del Sur, en medio de Israel, y desde el Negev, antes de converger en el Knesset. El tráfico se mantuvo lento y paralizado en una de las principales autopistas de Israel, que conecta el norte y el sur del país.
Según el jefe del municipio de Qulansawe, Abdel Basit Salameh, la protesta fue organizada en respuesta a la llamada del alto Comité Árabe de Seguimiento en Israel. Señaló que muchos de los líderes de la comunidad palestino-árabe en Israel tomaron parte en la misma.
Salameh también señaló que la policía israelí intentó detener la protesta aludiendo a la congestión que causó. Los agentes de policía intentaron multar a varios conductores y un hombre fue arrestado.
El jefe del Comité de Seguimiento, Mohamed Baraka, dijo que esta protesta era parte de una serie de actividades encaminadas a desafiar la política de demoliciones de Israel.
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