La Autoridad Palestina advirtió el viernes que el acuerdo del Tribunal Supremo de Israel de demoler más de 12 pueblos palestinos en Masafer Yatta equivale a una limpieza étnica.
Según la agencia de noticias Wafa, estos desalojos provocarían el desplazamiento de más de 4.000 ciudadanos palestinos, confirmó Nabil Abu Rudeineh, portavoz del presidente de la AP, Mahmud Abbas.
Abu Rudeineh también condenó la expropiación por parte de Israel de 22.000 dunums de tierra palestina en varias aldeas al sur de Jericó como parte del plan de asentamientos E1, que pretende aislar la ciudad ocupada de Jerusalén del resto de la Cisjordania ocupada.
"La decisión israelí relativa a las aldeas de Masafer Yatta, que afecta a miles de ciudadanos palestinos, entre ellos 500 niños, equivale a un desplazamiento forzoso y a una limpieza étnica, en violación del derecho internacional y de las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad de la ONU", afirmó Abu Rudeineh.
Y añadió: "Estas medidas son peligrosas, se condenan y se rechazan. Todas las demoliciones, desalojos y asentamientos israelíes se inscriben en el marco del régimen de apartheid que la ocupación aplica a los palestinos y a sus tierras en medio del silencio internacional."
El funcionario de la AP subrayó que "esto tendrá graves consecuencias sobre el terreno", atribuyendo toda la responsabilidad de las consecuencias al gobierno israelí.
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Abu Rudeineh dijo que estas medidas israelíes "Llegan en un momento en el que muchas partes regionales e internacionales están realizando esfuerzos para evitar la escalada y aliviar las tensiones sobre el terreno como resultado de la continua agresión israelí contra nuestro pueblo y nuestros lugares sagrados islámicos y cristianos en la Jerusalén ocupada".
Hizo un llamamiento a la comunidad internacional para que asuma sus responsabilidades y: "Convertir la condena silenciosa de los asentamientos en acción presionando al gobierno israelí para que ponga fin a sus asentamientos, matanzas, intentos de cambiar el statu quo en Al-Haram Al-Sharif e incursiones en ciudades y pueblos palestinos".
Al mismo tiempo, instó a la administración estadounidense a asumir sus responsabilidades para detener la "imprudencia israelí" que alimenta la escalada y las tensiones.
"Es hora de que los compromisos de la administración del presidente Biden se conviertan en realidad sobre el terreno porque no se puede permitir que continúe la situación actual impuesta por las provocadoras decisiones y medidas israelíes", expresó Abu Rudeineh.
Según las estadísticas de la ONU, Israel ha demolido o expropiado 217 edificios palestinos en Masafer Yatta desde 2011, lo que ha provocado el desplazamiento de 608 palestinos.
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