Se ha pedido al poder judicial de Túnez que emita una resolución para liquidar y disolver el Banco Franco-Tunecino, una de las instituciones bancarias más antiguas del país, según ha informado Reuters.
El Comité para el Rescate de Bancos e Instituciones Financieras en Crisis, encabezado por el Gobernador del Banco Central de Túnez, ha declarado que ha constatado que el banco ha dejado de pagar y no puede ser rescatado. Se trata del primer banco tunecino que se declara en quiebra debido a los problemas financieros acumulados durante muchos años.
La comisión añadió que el Fondo de Depósitos Bancarios compensará a los depositantes hasta un máximo de 60.000 dinares tunecinos (unos 20.600 dólares).
El banco fue el centro de una disputa que duró más de tres décadas entre uno de sus primeros accionistas y el Estado tunecino. Este último confiscó en su momento todas las acciones, lo que agravó los problemas financieros de la institución.
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