Viajar es una de las mejores maneras de descubrir nuevos alimentos y combinaciones de sabores. Me encanta probar platos locales donde quiera que vaya. Una de mis cosas favoritas para hacer es cocinar un plato que he probado en el extranjero y dejar que los nuevos sabores me inspiren a crear algo nuevo.
Las salchichas de Turquía son un ingrediente increíble porque tienen mucho sabor y elevan cualquier plato al que se añaden. Es muy similar al chorizo español, ya que ambos están llenos de pimentón ahumado y algo de picante. Este es el acompañamiento perfecto para una proteína más suave, como el pollo. La adición de cítricos y tomillo refresca el plato, mientras que las patatas hacen de él una comida equilibrada.
Lo mejor es que todos estos ingredientes pueden ser puestos en una bandeja al horno, incluso con antelación si se quiere, y dejarse cocinar por su cuenta. Me gusta hacer esto para los amigos ya que permite cocinar una gran cantidad de comida en poco tiempo y con un mínimo esfuerzo, dejándonos libres para socializar con nuestros invitados en lugar de trabajar como esclavos sobre una estufa caliente.
Ingredientes:
- 4 patas enteras de pollo (muslo y pechuga)
- 4-5 cucharadas de aceite de oliva
- 1 kg de patatas
- 2 cebollas rojas medianas
- 300 gr. de salchichas de Turquía 300
- 1 naranja
- 1 limón
- 2 cucharadas de hierbas italianas mixtas
- 2 cucharadas de tomillo fresco
- Sal y pimienta
Instrucciones
1. Colocar el pollo en una bandeja de horno y rociar con aceite de oliva. Se sazona con sal y pimienta y se deja a un lado.
2. Cortar las patatas en trocitos, la cebolla en rodajas y la salchicha en trozos de tamaño medio. Asegurarse de retirar las cubiertas de la salchicha. Colocar en una bandeja de horno, asegurándose de que están distribuidas de manera uniforme. Agregar la cáscara de la naranja y de limón y exprimir el jugo del limón por encima de todo. Picar el tomillo fresco y rociar junto con las hierbas italianas. Rociar con aceite de oliva, sazonar con sal y pimienta, asegurándose de que todo está recubierto de manera uniforme. Mantener la naranja para servir.
3. Hornear a 200ºC durante 45 minutos, o hasta que el pollo y las patatas estén bien cocidas. Si la piel no está lo suficientemente crujiente, se puede poner debajo de la parrilla durante unos minutos.
4. Servir con ensalada y unas gotas de la naranja. ¡A disfrutar!
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